Le tengo miedo a las cirugías. Tuve un problema de urología y conozco esta experiencia. No se puede oír nada, pero se puede ver todo. Ves en el reflejo cómo el doctor trata tu cuerpo con un isturí. Estuve en el ejército, así que no soy un débil de corazón, pero fue una pesadilla. No quería repetir esa experiencia, por eso elegí Revitaprost. Tres semanas después, vi los resultados. Dejé de sentir dolor en la ingle y de sacar orina con sangre.